23.03.2017 - GALICIA

Declaración institucional del Concello de Pontevedra de apoyo al Manifiesto del Día Internacional del Pueblo Gitano

Manifiesto del Día Internacional del Pueblo Gitano – 2017

 

Hoy debería ser un buen día en el largo viaje de la humanidad.

Hoy, 8 de abril, se celebra, celebramos, el Día Internacional del Pueblo Gitano.

Hoy es un buen día para hacer escala en ese largo viaje, detenerse al borde de la historia, escuchar su rumor y mirarla a los ojos con el coraje de la memoria que va al rescate de la esperanza.

Esa mirada de la memoria profunda nos cuenta una historia de un pueblo maltratado, perseguido casi sin descanso, sin poder tomar aliento, algunas veces hasta el límite, un miedo más allá del miedo, un horror más allá del horror, como ocurrió en el Holocausto nazi, del que fueron víctimas cientos de miles de hombre y mujeres, niños y ancianos, personas gitanas por el hecho de serlo.

Hoy es un buen día para que esa memoria del dolor nos sirva para reactiva el tiempo presente. Hacer balance. Mirando también al presente con coraje en los ojos. Hacer las preguntas que un pueblo se hace cuando está en pie. Compartirlas con toda la sociedad. Compartirlas con fraternidad, solidariamente, pero sin ocultar o disfrazar la realidad.

Comprobar en qué medida la atmosfera está contaminada todavía de racismo. Como el lenguaje está intoxicado por formas de xenofobia. Y como, en muchas ocasiones, a la discriminación en la práctica se une el reproche, la invisibilidad y la desconsideración. Y la ignorancia. La ignorancia que existe sobre la realidad del Pueblo Gitano y sobre su historia y su cultura y la verdadera causa de los perjuicios que, por desgracia, todavía condicionan la mentalidad de mucha gente.

Hoy es un buen día para gritar en romanés, Dosta!, que significa: ¡Ya basta!

El Pueblo Gitano es parte sustancial de España, de sus comunidades, con una membresía de siglos. Es parte constitutiva de Europa. Más de doce millones de personas que pueblan sus días y sus noches, que viven y sueñan, que conocen y aman el manuscrito de la tierra. Que son, en verdad, ciudadanos del mundo, que comparten el regalo de su cultura, ese patrimonio sublime, ese batir entrañable de la historia íntima de la humanidad.

Desde 1971, el Pueblo Gitano tiene un himno, que comienza como paseo: ‘Gelem, Gelem’... (anduve, anduve un largo camino) Y una bandera, que tiene como símbolo la rueda de un carro, otra metáfora de la vida como un continuo recomenzar.

Hoy es un buen día para seguir y recomenzar el camino.

El Día Internacional del Pueblo Gitano como un día de compromiso para gitanos y gitanas y para las instituciones y la sociedad entera.

Un buen día para acabar con la suspensión de las conciencias. Un buen día para limpiar las miradas de prejuicios. Un buen día para limpiar el lenguaje de mezquindades. Un buen día para poner freno, con una democracia efectiva, a las injusticias que suponen una derrota de la humanidad.

Hoy es un buen día para que los derechos reconocidos puedan ser ejercidos. Los derechos del Pueblo Gitano, que son todos y cada uno de los derechos que como ciudadanos les corresponde. Los derechos están para ejercerlos, y si un pueblo no puede ejercerlos es toda la sociedad la que está privada, la sufre esa sustracción.

Es inaceptable que se presente como normalidad un decorado de cartón piedra, que se llame realidad a una pantalla virtual, si lo que hay detrás, cuando cae el decorado y se apaga la pantalla, es la inclemencia, la maleza social, el prejuicio, la discriminación, el estigma, la mancha de la injusticia como un espejo que reflecta la ceguera de quien no quiere verla.

Hoy es un buen día para seguir erguidos a lo largo del camino andado. Derecho a derecho, libertad a libertad.
Un buen día para comprometerse a superar los obstáculos de la educación. Hacer de la escuela y de toda la enseñanza un espacio querido y amable, donde realizarse como persona y donde sea respetada la propia identidad.

Un buen día para que se deje de hablar de chabolismo en España y cada familia gitana tenga un hogar y una vivienda digna.

Un buen día para que se incremente la formación de los trabajadores y trabajadoras gitanas y se ponga fin a la discriminación en el empleo.

Un buen día para garantizar la atención en todos los niveles en la sanidad pública.

Hoy, día 8 de abril, Día Internacional del Pueblo Gitano, es un buen día para unirnos y compartir la bandera con la rueda de la esperanza.

 

Manuel Rivas

 

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