13.02.2015 - OPINIÓN

Reacciones ante ‘Los Gipsy Kings’, el nuevo programa de Cuatro.
No podemos permitir otra afrenta a la imagen de la comunidad gitana

Por Consejo Estatal del Pueblo Gitano


Rebeca, una de las jóvenes protagonistas del reality, rodeada de lujo / Cuatro

La cadena de televisión Cuatro emitió el domingo 8 de febrero, en el prime time, el programa ‘Los Gipsy Kings’, un docu-reality grabado a finales de julio de 2014, protagonizado por cuatro familias gitanas.

Este nuevo programa lo realiza Cuatro en colaboración con la productora La Competencia, responsable del docudrama ‘Palabra de Gitano’, del que se emitieron dos largas temporadas en la misma cadena y que fue duramente contestado por el movimiento asociativo gitano, incluidas las entidades de este Consejo.

El nuevo programa ‘Los Gipsy Kings’, según sus espacios promocionales, muestra “cómo es el día a día de algunas de las dinastías gitanas más reconocidas en su comunidad”, entre ellas los Salazar, la familia de Los Chunguitos y de las Azúcar Moreno o la familia de los Fernández Navarro, “los reyes del lujo” (cuyo referente más visible es Joaquín Fernández ‘el Prestamista’). Más gráficamente, el programa se define, por algunos medios, como la tercera edición de ‘Palabra de Gitano’, ya que sigue el mismo formato a cargo de la misma productora.

Los hermanos Salazar, la familia Fernández Navarro o las otras protagonistas son, lógicamente, libres de participar en cualquier programa de televisión. Pero desde  las entidades del Consejo Estatal del Pueblo Gitano queremos también señalar que la identificación de este tipo de espacios –ya en su propio título y en todos sus contenidos– con el término “gitano/a” y derivados, supone convertir a esta comunidad en protagonista u objeto de la comunicación, siendo por tanto perjudicada en su imagen social. No hay que olvidar que hablamos de espacios, en muchos momentos, con audiencias millonarias, y siendo empresas privadas, también con beneficios millonarios, lo cual sería legítimo si no fuera a costa de la dignidad de las personas o comunidades, como en este caso la gitana.

Con ‘Palabra de Gitano’ se produjo un daño irreparable a la imagen social de la comunidad gitana y esto le ha salido gratis a la productora y a la cadena. Y con lo visto en el primer programa de ‘Los Gipsy Kings’ podemos prever el grave perjuicio que supondrá a la imagen de la comunidad gitana, identificada en la mayor parte de los contenidos de su hora de duración, con el lujo y el despilfarro, algo que choca frontalmente con la difícil situación que atraviesa la mayoría de las familias gitanas españolas, siendo la comunidad más castigada por la crisis, como ha demostrado recientemente el Informe FOESSA. En definitiva, una imagen estereotipada y caricaturesca que va calando en la sociedad con la amplificación de estos programas que tienen audiencias masivas.

Cabe destacar que la comunidad gitana sigue siendo uno de los grupos de población más rechazados y discriminados según los datos de los Eurobarómetros de discriminación y otros estudios. Y la principal causa de este rechazo social es la imagen negativa generalizada que pesa sobre esta comunidad, una imagen a la que contribuyen  algunos programas televisivos como los ya mencionados.

La discriminación constituye una vulneración de un derecho fundamental, algo que está prohibido en nuestra Constitución, en el Código Penal y en la Legislación europea traspuesta a nuestro ordenamiento jurídico en esta materia, como la Directiva 2000/43.

Por todo ello, desde las entidades del Consejo Estatal del Pueblo Gitano queremos expresar nuestro rotundo rechazo a este nuevo programa y denunciar públicamente el daño que produce a la comunidad gitana en su conjunto. También denunciamos la falta de ética profesional que supone utilizar a personas individuales de la comunidad gitana para hacer de ellas un espectáculo que estigmatiza a toda la comunidad, con el único fin de lograr audiencia y los beneficios económicos asociadas a ella. Es nuestra intención utilizar todos los medios legales y de movilización de la opinión pública contra este programa ya que tenemos la completa seguridad de que, nuevamente, se va a ocasionar un terrible e irreparable daño a la imagen social de la comunidad gitana, algo que contribuye al fomento de  la discriminación de esta minoría.

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